Un unipersonal de notable potencia que se construye desde la intimidad del pensamiento de Aldo, un hombre que emprende un viaje hacia el salar en moto, impulsado por una promesa. La ruta, los pájaros y ese recorrido externo funcionan como espejo de una travesía interna más profunda, tejida con lucidez poética y una dramaturgia precisa, a cargo de Juan Ignacio González e Ignacio Torres.
Marcelo Subiotto interpreta al personaje con maestría. Con una presencia hipnótica, invita a cada espectador y espectadora a adentrarse en un viaje que, más que el clásico camino del héroe, se presenta como el recorrido del antihéroe. Sin embargo, su Aldo —en un comienzo aparentemente simple— revela una humanidad compleja, compuesta por múltiples capas que emergen a lo largo del relato.
El trabajo actoral es sutil y arrasador a la vez: con un inicio cargado de humor y ternura, las conjeturas y asociaciones del personaje generan una danza mental tan impredecible como encantadora. A medida que avanza la obra, esos pensamientos se tornan más oscuros y densos, llevando al público a una zona de vértigo, potenciada por un giro escénico inesperado que pone el cuerpo en juego.
El final, de una estética casi cinematográfica, no solo resulta eficaz por su atractivo visual y contundente en términos expresivos, sino que cierra el círculo narrativo con maestría. La dramaturgia siembra desde el comienzo las claves de ese desenlace, logrando una estructura coherente y profundamente conmovedora. Al llegar, el aplauso es inevitable y sentido.
La escenografía, diseñada por Julieta Potenze, es precisa y enmarca el relato con la intimidad justa. Funciona como un lienzo mutable que, en sintonía con la narración de Aldo, puede transformarse en un espacio de calidez o en un territorio sombrío, acompañando los vaivenes emocionales del personaje.
Los pájaros es una experiencia teatral envolvente, íntima y feroz. Un trabajo impecable en todos sus aspectos, magistralmente dirigido por Juan Ignacio González, que confirma el talento de sus creadores y la enorme capacidad interpretativa de Marcelo Subiotto.
Dramaturgia: Juan Ignacio González, Ignacio Torres | Actúa: Marcelo Subiotto | Vestuario: Nadia Sandrone | Escenografía: Julieta Potenze | Iluminación: Lucía Feijoó | Música: Alfredo García, Clara Maydana | Fotografía: Federico Pérez Gelardi | Diseño gráfico: Sergio Calvo | Prensa: Antonela Santecchia | Producción: Los Pájaros, FIEL Producciones | Colaboración artística: Sergio Calvo, Marcelo Subiotto | Dirección: Juan Ignacio González